La plata es uno de los metales más preciados cuando se trata de joyería de calidad. Una de sus principales características es que es un material muy duradero que además tiene un brillo peculiar y muy intenso.
Por su composición química, cuando la plata entra en contacto con el aire, la luz, el agua y otros compuestos por tiempo prolongado sufre un proceso que se conoce como sulfuración. Cuando la joyería de plata pasa por este proceso, notarás que comienza a mancharse en tonos de azul o negro.
Si te encanta tu joyería de plata y te gustaría prolongar su vida, existen muchas cosas que puedes hacer para prevenir que se dañe; e incluso cuando presenta manchas hay algo que puedes hacer al respecto. Sigue leyendo para descubrir cómo limpiar y cuidar tu joyería de plata.
El almacenamiento ideal
Lo primero que debes tener en cuenta es dónde mantendrás tu joyería de plata cuando no la estés usando. Debes almacenarla en un lugar fresco y seco, o lo más posible apartado de la humedad en caso de que vivas en un lugar húmedo. Puedes colocar tus piezas dentro de un joyero que a su vez esté dentro de tu armario para que tampoco reciba luz directa. Este joyero deberá tener tela de forro para proteger tus piezas de ser aplastadas o que se rayen con otra superficie.
Elementos a evitar
Como mencionamos, la plata es un elemento que es muy delicado cuando lo pones en contacto con otras sustancias o ambientes. Lo primero que debes evitar es que tu joyería de plata entre en contacto con cualquier producto químico, ya sea de limpieza o incluso de uso personal como perfumes, lociones y cremas.
Si vas a salir de viaje, puedes presumir tus piezas pero en ambientes secos. Por ningún motivo introduzcas la joyería en la piscina, en el mar o en aguas termales, ya que esto acelerará el proceso de sulfuración.
¿Qué hacer si tu joyería tocó el agua?
Recalcamos lo importante que es que tu joyería de plata no toque el agua en la medida de lo posible. Incluso, al momento de lavarte las manos, te recomendamos que te retires anillos y pulseras y te los coloques una vez que tus manos estén secas.
En caso de que tus joyas de plata hayan estado en contacto con el agua, inmediatamente busca una pieza de paño o un pañuelo suave y de textura ultra lisa y seca tu pieza, frotando con gentileza para no provocar raspones.
Limpieza habitual
Tener joyería de plata implica que deberás tener un cuidado constante con tus piezas para prevenir daños irreparables. De manera frecuente, tal vez un par de veces al mes, te recomendamos sacar todas tus piezas de plata y limpiarlas en seco suavemente con un paño de pulir para reavivar su brillo natural. Cuando notes que una de tus piezas ya esté particularmente oscura, sumérgela unos minutos en un líquido limpiador de plata y frota suavemente con el mismo paño para ir sacando la decoloración.
¡Ahí lo tienes! 4 sencillos pasos con los cuales tus piezas de joyería de plata estarán como nuevas sin importar cuánto tiempo lleven en tu alhajero. Recuerda que los pasos preventivos son aún más importantes para que nunca tengas que batallar limpiando la plata de tus aretes, anillos y pulseras.